Bastidor de bordado, también conocidos como bastidor tubular o de patchwork, es una excelente opción para que tus labores queden perfectas, pues te permitirán tener la tela lo suficientemente estirada para que el hilo se deslice de forma fácil.
El bastidor de bordado se utilizan para tensar un tejido y así facilitar que se borde un diseño sobre él. Se trata de un bastidor, generalmente en forma de aro o cuadrado, que gracias a la tensión que ejerce sobre la tela o la prenda, ayuda a que el trabajo sea lo más pulcro posible. En el mercado puedes conseguirlos de madera y plásticos, todo depende del uso que les quieras dar.
Los básicos, y que siempre tienes que tener a la mano, para cualquier labor de bordado son: hilo, aguja, un aro para bordar, tela y un par de tijeras.
Tus primeros pasos en el Bordado:
Hilos.
Agujas.
Aros para bordar.
Telas.
Tijeras.
El uso de bastidores de bordado y aplicaciones tiene varias ventajas para los bordadores y costureros.
En primer lugar, los bastidores de bordado mantienen la tela tensa y plana, lo que hace que sea más fácil bordar o aplicar. Esto ayuda a prevenir arrugas y pliegues no deseados en la tela y garantiza que el diseño se aplique de manera uniforme.
Además, son útiles para mantener el tejido en su lugar mientras se trabaja, lo que reduce el riesgo de que la tela se mueva o se desplace durante el proceso de bordado o aplicación. Esto ayuda a garantizar que el diseño se aplique de manera precisa y uniforme.
Otra ventaja es que permiten al bordado trabajar con ambas manos libres. Al sujetar la tela en su lugar con el bastidor, el bordador puede trabajar con las dos manos para coser y aplicar el diseño con mayor facilidad y precisión.
Por último, también pueden ser útiles para proteger la tela de los desgarros y otros daños durante el proceso de bordado o aplicación. Al mantener la tela tensa y plana, los bordadores pueden evitar que la tela se estire o se rompa mientras trabajan en ella.
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